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Un grupo de empresas formado por Westinghouse, Scandiaconsult y BNFL proyectarán, mediante contrato con la empresa sueca de combustibles y residuos nucleares SKB, una instalación para encapsular combustible gastado en recipientes de cobre, para su permanencia definitiva en granito.
Esta instalación constituye una extensión de la que alberga los combustibles gastados suecos, denominada CLAB, formada por piscinas subterráneas. La técnica de encapsulación ha sido ensayada en un laboratorio anejo.
Las tres empresas citadas cuentan con experiencia en los procesos involucrados. Westinghouse Suecia será responsable del proyecto y de su gestión, así como de los sistemas mecánicos y eléctricos; BNFL se encargará de todo lo que concierne a las operaciones en celdas calientes y Scandiaconsult del proyecto de estructuras y obras.
El proyecto incluye, además de la instalación de encapsulado, los informes de seguridad e impacto ambiental, que permitan al organismo regulador autorizar la construcción y el funcionamiento.
La duración del proyecto se estima en dos años, de modo que la petición de licencia pueda hacerse en 2006.
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